Manoli además fue la mejor madre para sus tres hijos, Francisco, Inma y Álex; la mejor abuela para su querido nieto Rafa; cuidadora cariñosa de su madre, además de ser la mejor esposa para Francisco Romero, su compañero y padre ejemplar. Junto a su marido Francisco, Manoli se desplazó a Madrid hace décadas y removió cielo y tierra hasta tratar de lograr un diagnóstico para su hijo Álex, en un tiempo en el que aún no se detectaba el trastorno del autismo en Córdoba, al no existir profesionales especializados en la provincia.

Manoli Romero, el día que recibió el premio Luchaora, que le concedió la Asociación por la Igualdad Lola Castilla.

Manoli Romero, el día que recibió el premio Luchaora, que le concedió la Asociación por la Igualdad Lola Castilla. A.J. GONZÁLEZ

Manoli siempre estaba al lado del teléfono o de una taza de café para lo que necesitara cualquier persona que le pidiera consejo o ayuda y representó a la asociación en numerosos actos, congresos, centros educativos, conferencias, con el objetivo de concienciar a la población de la existencia del trastorno del espectro del autismo y de las necesidades que tienen las personas diagnosticadas de TEA y sus familias. Colaboró además siempre con el hospital Reina Sofía y con el Imibic en todos los ensayos clínicos que los médicos que la trataban decidieron podían contribuir con su recuperación.

Su familia la está velando este domingo en el tanatorio de las Quemadas y su responso está previsto también en esta misma jornada, a las 18.00 horas, en la parroquia de Jesús Divino Obrero (El Cerro), en Córdoba capital.

La asociación Autismo Córdoba (que reconoció en su día con un galardón su trabajo); la Asociación por la Igualdad Lola Castilla (que la distinguió con el premio Luchaora), la asociación Mujeres de Hoy, el Foro Andaluz del Bienestar Mental y otras muchas entidades y colectivos han mostrado su pésame por tan triste pérdida.

Fuente: Diario Córdoba